F.A.Q.

En nuestras viviendas de alquiler obtenemos una rentabilidad mínima del 3,50% sobre el coste de la inversión, todo ello sin tener en cuenta la posible revalorización de la vivienda. Nos comprometemos con nuestros clientes a obtener como mínimo esta rentabilidad.

Es el coste de compra de la vivienda más los impuestos y gastos jurídicos asociados a la compra y las posibles reformas a realizar.

El comprador siempre escoge un notario de su confianza, nosotros nos encargamos de tramitar toda la documentación junto a la notaría de su confianza para que usted realice la compra con un 100% de seguridad jurídica. Si no dispone de un notario de su confianza, nosotros tramitamos todas las compras e inversiones a través de un notario de Barcelona con el que trabajamos desde hace más de 20 años.

La compra de la vivienda más los impuestos y gastos jurídicos asociados a la compra se pagarán al vendedor en el momento de la firma en escritura pública ante notario.

En caso de realizar las obras con nosotros, se irán pagando las cantidades pactadas al constructor conforme vaya avanzando la obra y en los plazos acordados.

Quality Homes Barcelona solo recibirá de usted los honorarios pactados y según los plazos acordados.

El concepto de “gestión llaves en mano” es que nosotros nos encargamos absolutamente de todo. Nuestros inversores en la mayoría de las ocasiones no tienen tiempo, conocimientos, ni ganas en involucrarse en la gestión de la inversión de una vivienda para alquilarla posteriormente. Nosotros nos encargamos absolutamente de todo, a cambio de unos honorarios realizamos toda la gestión desde el inicio hasta el final, esto significa que recibimos el mandato de inversión del cliente y le devolvemos una vivienda alquilada para que solo tenga que disfrutar de la renta mensual todo ello con la máxima seguridad jurídica.

Nos reunimos con el cliente fijamos un presupuesto y buscamos la mejor opción siempre adecuada a la rentabilidad-riesgo que consideramos como óptima. Es importante tener un equilibrio entre la rentabilidad de la inversión y la búsqueda de un inquilino solvente.

La “liquidez” del activo es también un elemento crítico de cualquier inversión inmobiliaria.

En la actividad patrimonialista la mejor zona a invertir es aquella que tenga un precio medio -ni zonas de lujo ni zonas deprimidas – con todos los servicios (Comercios, colegios, ambulatorios, etc.)  y sobre todo con una buena red de comunicación de transporte público.

No nos precipitamos en escoger inquino. Intentamos buscar al inquilino ideal.

Si hemos de esperar unos días en encontrar al candidato optimo, nos esperamos.

La relación con los inquilinos suele ser a muy largo plazo y por ello debemos ser muy cuidadosos en esta tarea.

El índice de impagos en nuestra cartera y la cartera de viviendas que gestionamos es cero. Solicitamos la máxima información legal a los posibles inquilinos y la “química” que se establece en las visitas a la vivienda también funciona. Le explicamos a usted como inversor cual es la información legal que solicitamos a los candidatos.

Después de la experiencia de muchas viviendas reformadas, disponemos de unas calidades e ideas para que los materiales invertidos duren muchos años en la vivienda sin que ello este reñido con disponer de una vivienda donde el inquilino este a gusto y el coste de la reforma no sea elevado.

El inversor patrimonialista se puede implicar en la reforma de manera total, parcial o delegar en nosotros la totalidad de la gestión de la reforma. Habitualmente fijamos junto al cliente unas calidades y el día a día de la reforma lo gestionamos nosotros.

Disponemos de todos los industriales y proveedores. Arquitecto, albañiles, electricistas, carpinteros, pintores, aluministas, parketistas y todo ello gestionado por nuestro jefe de obras para que todo salga como lo esperado y presupuestado.

La reforma de viviendas no es muy compleja, habitualmente no utilizamos el servicio de un arquitecto ya que nuestro jefe de obras debido a su larga y dilatada experiencia ejecuta y planifica la obra sin mayor problema. Solo si la obra es muy compleja o requiere por su dificultad la intervención de un arquitecto tenemos un despacho de arquitectos que colabora con nosotros. En los casos que por normativa legal requiera la intervención de un técnico (por ejemplo, un refuerzo estructural) disponemos del despacho de arquitectos antes comentado.

Cuando tenemos un inversor con un pequeño parque de viviendas (4 ó 5 viviendas) habitualmente es el mismo inversor quien las administra debido al poco volumen de trabajo que implica, aunque también puede delegar esta gestión en nosotros.

Si hablamos de un parque de viviendas mayor y el inversor no se quiere implicar en la gestión del día a día colaboramos con un administrador de fincas que lo puede gestionar.

Estamos tan seguros de las obras que llevamos a cabo que nos comprometemos por escrito a dar una garantía de obra de dos años. Cualquier incidencia que sea ocasionado por la obra durante los dos primeros años será reparada sin ningún coste para el cliente.

La garantía de los electrodomésticos será cubierta por el fabricante.